Los fabricantes de impermeabilización demandan una regulación específica para las cubiertas descontaminantes
- Por medio de la fotocatálisis se puede eliminar la mayor parte de los contaminantes presentes en las zonas urbanas
- Las empresas fabricantes asociadas a AIFIM llevan años desarrollando esta tecnología y poniendo en el mercado soluciones fotocatalíticas para cubiertas de alta eficiencia.
Madrid, 08 de noviembre de 2021.- La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, más conocida como la COP26, que se celebrará hasta el 12 de noviembre en Glasgow (Escocia), se ha fijado como principales objetivos nacionales acelerar la acción de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero para mantener el límite del aumento de la temperatura a 1,5ºC y lograr la descarbonización para 2050.
Se trata de un reto para el que el sector de la edificación está preparado, según AIFIm, la Asociación Ibérica de Fabricantes de Impermeabilización. En este camino por alcanzar los compromisos propuestos en el Acuerdo de París, y que los países reunidos en la COP26 se están encargando de ampliar y fortalecer, la acción descontaminante o fotocatalítica en los edificios cumple un papel fundamental.
Según esta asociación, “por medio de la fotocatálisis se puede eliminar la mayor parte de los contaminantes presentes en las zonas urbanas, de tal manera que los materiales de construcción tratados con un fotocatalizador favorecen la eliminación de las partículas NOx que emiten los vehículos y la industria en las ciudades”.
Uno de los elementos de los edificios fundamentales para contrarrestar los efectos adversos del cambio climático es la cubierta: “Su construcción a partir de láminas asfálticas de impermeabilización convencionales autoprotegidas con un gránulo formulado con dióxido de titanio (TiO2), que es el catalizador más comúnmente utilizado, facilita la mejora de la calidad del aire”, apuntan en AIFIm. El TiO2, al ser activado como fotocatalizador por la componente ultravioleta de la luz solar, es capaz de eliminar por oxidación una amplia variedad de compuestos orgánicos e inorgánicos.
Sin embargo, la presencia de las cubiertas descontaminantes en el parque inmobiliario español es todavía testimonial y demanda un mayor compromiso de los gobiernos en materia legislativa. “No existe una normativa específica que regule la instalación y el mantenimiento de las cubiertas fotocatalíticas o descontaminantes, pese a que son capaces, según condiciones atmosféricas, de llegar a neutralizar grandes cantidades de NOx al año, comparable a la cantidad de emisiones que emiten más de 20 vehículos circulando durante el mismo período de tiempo”, destacan desde AIFIm.
Mientras que llega una normativa que impulse la implantación de las cubiertas fotocatalíticas, las empresas fabricantes asociadas a AIFIM llevan años desarrollando esta tecnología y poniendo en el mercado soluciones fotocatalíticas para cubiertas de alta eficiencia. Desde la asociación recomiendan aprovechar las rehabilitaciones que se van a llevar a cabo para mejorar la eficiencia energética de las cubiertas, impulsadas por la llegada de fondos europeos en forma de subvenciones, para instalar este tipo de sistemas que van a contribuir a mejorar el aire que respiramos y a disminuir la contaminación de las ciudades.
Además de su colaboración en la mejorar de la calidad del aire exterior, otra de las principales ventajas de las cubiertas descontaminantes es su fácil instalación y el mínimo mantenimiento que requieren: “Únicamente es necesario limpiarlas para evitar que deje de funcionar el proceso de descontaminación. Asimismo, su colocación es exactamente igual que una impermeabilización a partir de membrana asfáltica convencional”, destacan en AIFIm.
Por sus múltiples propiedades y su alineamiento con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) marcados por las Naciones Unidas para el 2030, desde esta asociación demandan un mayor desarrollo de las cubiertas descontaminantes.