Claves para elegir la imprimación adecuada según el soporte

El rendimiento y la durabilidad de un sistema de impermeabilización líquido dependen en gran medida de una correcta selección y aplicación de la capa de imprimación. Este componente no solo actúa como puente de adherencia entre el soporte y la membrana, sino que también cumple un papel esencial al adaptarse a las particularidades de cada superficie, garantizando así la cohesión y estabilidad del sistema completo. Por ello, la elección de la imprimación adecuada es un factor determinante para asegurar la eficacia y la vida útil del sistema impermeabilizante.
En función del tipo de soporte y de las condiciones de aplicación, pueden distinguirse distintas tipologías:
Imprimación epoxi
Las imprimaciones epoxi se caracterizan por su gran capacidad de penetración y consolidación, así como por su buena tolerancia a la humedad. Estas propiedades las hacen especialmente indicadas para soportes como el hormigón o los morteros, donde sellan la porosidad, fijan partículas sueltas y crean una base compacta que evita la absorción excesiva de la membrana impermeabilizante posterior.
Imprimación acrílica
Por otro lado, las imprimaciones acrílicas, formuladas a base de agua y de secado rápido, están diseñadas para superficies porosas y absorbentes sometidas a condiciones de exigencia moderada. Se aplican con frecuencia sobre hormigones, morteros o elementos de albañilería, especialmente cuando se requiere una ejecución ágil. Su capacidad para regular la absorción y permitir la transpiración del soporte favorece una gestión equilibrada del vapor de agua, lo que las hace idóneas para superficies con cierta humedad residual no capilar.
Imprimación poliuretánica
Por su parte, las imprimaciones poliuretánicas ofrecen excelentes resultados sobre soportes secos que presentan movimientos dimensionales, ya sea por cambios higrotérmicos, como ocurre con la madera, o por solicitaciones estructurales. Gracias a su elevada flexibilidad, se adaptan a las dilataciones y contracciones sin perder adherencia ni comprometer la continuidad de la membrana. Además, su buena capacidad de penetración en materiales irregulares garantiza un anclaje firme y una óptima adaptación a la heterogeneidad del sustrato. Por estas razones, son la elección más recomendable en soportes dinámicos o inestables, y resultan especialmente útiles en trabajos de rehabilitación sobre láminas asfálticas, morteros con fisuras o pavimentos cerámicos, donde aportan un anclaje seguro y duradero.
Imprimación híbrida
Finalmente, las imprimaciones híbridas, que combinan las propiedades de las anteriores, están concebidas para condiciones más exigentes, como soportes con altos niveles de humedad residual o estructuras sometidas a presión de agua, por ejemplo, en cimentaciones o elementos enterrados.
Como hemos visto, la selección de la imprimación debe basarse siempre en las características específicas del soporte, su estado y la compatibilidad con la membrana impermeabilizante. En el ámbito de la construcción, es frecuente intentar prescindir de esta capa para reducir costes o tiempos de ejecución, pero este ahorro inicial suele comprometer la durabilidad del sistema. Una preparación adecuada del soporte y una imprimación correctamente elegida son, sin duda, la base de una impermeabilización eficaz y duradera.
Asimismo, adoptar estándares de instalación avalados por la industria, como los promovidos por AIFIm, ayuda a mitigar riesgos de filtraciones y una adherencia deficiente.