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A la hora de seleccionar un producto para llevar a cabo un proyecto de impermeabilización, se busca siempre una solución que, además de una excepcional resistencia al agua, también ofrezca una alta durabilidad, resistencia a los productos químicos y, por supuesto, a las condiciones climáticas adversas, siendo adecuada al uso al que va a ser destinada.

La poliurea es una membrana muy versátil y duradera, que se utiliza ampliamente en aplicaciones de impermeabilización y protección. Se genera tras la reacción química (rápida y auto catalítica) entre dos componentes (un isocianato y una amina o resina). Cuando se aplica como membrana impermeable, la poliurea forma una capa continua, sin solapes, elástica y resistente que se adhiere totalmente a multitud de soportes y que se adapta a cualquier geometría por irregular que sea, facilitando notablemente el tratamiento y el remate de los puntos singulares. Esta capa tiene una excelente resistencia al agua y al vapor, lo que la convierte en una opción ideal para impermeabilizar y proteger edificios y estructuras contra la humedad.

Hay una enorme variedad de posibles formulaciones que se pueden utilizar para obtener las propiedades deseadas, por lo que es vital la selección y dosificación de las materias primas.

La poliurea ofrece una serie de beneficios para la impermeabilización:

• Es extremadamente duradera y resistente a la abrasión, lo que la hace adecuada para su uso en superficies expuestas con altos requerimientos mecánicos y químicos
• Es altamente elástica, lo que le permite resistir la dilatación y contracción por cambios de temperatura sin agrietarse ni desprenderse.
• Tiene un tiempo de curado rápido y se puede aplicar en un amplio rango de temperaturas y en diferentes condiciones climáticas. Esto permite una instalación más rápida y eficiente en comparación con otros sistemas de impermeabilización, con una rápida entrada en servicio de la superficie tratada.

Actualmente existen en el mercado 3 tipos de revestimientos basados en poliurea y poliuretano:

• Poliurea pura (poliamina + isocianato)
• Poliurea hibrida (poliamina + isocianato + poliol + catalizador)
• Elastómero de poliuretano “de aplicación en caliente” (isocianato + poliol + catalizador)

La composición de un sistema híbrido es una combinación de los sistemas de poliuretano y poliurea. El componente isocianato puede ser el mismo en los tres tipos.

La formulación de cualquiera de estos tres tipos puede tener base aromática (la más habitual) o alifática (con mayor estabilidad al cambio de color por efecto de los rayos UV). Esta última se utiliza menos al tener un coste superior.

La poliurea se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones de impermeabilización, incluyendo cubiertas, cimientos, tanques de almacenamiento, puentes, piscinas, túneles y revestimientos de contención de líquidos, entre otros. También se puede aplicar en diferentes sustratos y antiguos recubrimientos que aún conservan buena adherencia al soporte. Éste ha de ser preparado de forma conveniente, verificando la ausencia de presión negativa y las condiciones higrotérmicas, con la imprimación adecuada en cada caso.

Desde AIFIm siempre recomendamos que la aplicación sea llevada a cabo por profesionales acreditados. Asimismo, siempre se deben de seguir las instrucciones del fabricante para garantizar que se cumplan todas las propiedades del producto.