Cómo rehabilitar una cubierta Deck
La cubierta Deck, solución plana muy usada en naves industriales, aeropuertos, centros comerciales o polideportivos, en general en grandes superficies que requieren huecos para chimeneas de salidas de humos, instalaciones o iluminación, se caracteriza por su rápida ejecución en el montaje y su fácil adaptación a cualquier geometría del inmueble.
Pero rehabilitar una cubierta de estas características, por ejemplo, en una nave industrial, puede suponer parar la actividad interior con los consiguientes sobrecostes que representan para la propiedad, algunos difíciles de evaluar.
Por ello, ante la necesidad de actuar sobre una cubierta Deck para reparar filtraciones de agua que hayan surgido por su elevada exposición a condiciones climatológicas adversas, es importante tener en cuenta una serie de aspectos.
En este sentido, la Asociación Ibérica de Fabricantes de Impermeabilización (AIFIm), integrada por empresas líderes del sector como BMI Group, ChovA, Danosa, MAPEI, RENOLIT ALKORPLAN, Sika y SOPREMA GROUP, aconseja aprovechar la oportunidad de rehabilitar este tipo de cubiertas para colocar láminas impermeabilizantes, como la membrana TPO, de alta reflexión solar mediante fijación mecánica sobre la lámina existente.
“De esa manera no generamos engorrosos y costosos escombros, mejoramos el aislamiento térmico reduciendo el efecto `isla de calor´ gracias a un alto índice de reflexión solar (SRI) superior a 90 y podremos seguir con la actividad habitual que se desarrolla bajo la cubierta”, argumentan desde AIFIm.
Ventajas de la membrana TPO
La membrana TPO (poliolefina termoplástica) es, junto con la sintética de PVC, la más utilizada para la impermeabilización de cubiertas. Se caracteriza por una elevada resistencia frente a la humedad y a las altas temperaturas, durabilidad y un comportamiento estable que hace que no se contraiga ni se dilate con facilidad.
“Es importante destacar que con la membrana o lámina impermeabilizante TPO, al soldar por aire caliente, se garantiza una total estanqueidad en toda la superficie de la cubierta, pudiendo ser adherida o fijada mecánicamente al soporte atravesando el aislamiento”, destacan desde AIFIm.
Así, una solución eficiente de reparación consiste en la instalación de una lámina de TPO, lámina sintética de poliolefinas flexibles armada con red de poliéster fijada mecánicamente sobre la cubierta existente.
Desde el punto de vista de la elección de la correcta fijación mecánica (tipología y longitud), que sujetará todos los nuevos elementos a colocar en la renovación de la cubierta, es fundamental conocer el tipo, espesor, características y estado del substrato o base soporte de la cubierta (chapa perfilada, madera u hormigón) y, en el caso de las rehabilitaciones, es fundamental realizar una prueba de extracción in situ.
Comprobaciones
Ahora bien, según AIFIm, antes de colocar la nueva lámina impermeabilizante en la cubierta reparada hay que realizar una serie de comprobaciones para garantizar el buen comportamiento del sistema de impermeabilización:
- Comprobar las pendientes.
- Verificar el buen estado del aislamiento térmico, que esté cohesionado y tenga la resistencia mecánica y planimetría necesaria, no haya absorbido humedad y cubra toda la superficie para evitar posibles puentes térmicos.
- Verificar el estado y sección de los elementos de evacuación, tanto sumideros como posibles canalones.
- Repasar si es necesario los petos y zonas donde se vayan a realizar los anclajes perimetrales.
- Calcular el número correcto de fijaciones mecánicas, en función de la zona geográfica y características del edificio.
- Evaluar los puntos singulares existentes en la cubierta, como anclajes de maquinaria y posibles actuaciones que hayan tenido lugar en la misma.
“Una vez realizadas las comprobaciones necesarias, la instalación de una lámina de TPO nos aportará un sistema seguro, de elevadas prestaciones mecánicas, fácil y rápido de ejecutar, con pocos solapes gracias a las dimensiones de los rollos, de elevada vida útil, ligero (poco peso por m2), compatibles con otros materiales y resistente a los rayos U.V”, concretan en AIFIM. “Además, gracias a su SRI este tipo de membrana nos aportará una mejora de le eficiencia energética del edificio”, añaden.
Desde la Asociación Ibérica de Fabricantes de Impermeabilización recuerdan que la cubierta Deck no es transitable, por lo que es importante habilitar zonas destinadas a las labores periódicas de mantenimiento. Con este tipo de trabajos garantizados en el tiempo no será necesaria una reparación o rehabilitación profunda de la cubierta.
Artículo publicado previamente en la Revista ANERR